Junto a San José, con el excepcional frente costero de las playas de Genoveses y Mónsul, se encuentra la finca El Romeral.
Esta explotación, una de las más extensas de Níjar, conserva un magnífico conjunto de cortijos tradicionales con todas sus edificaciones complementarias. Desde principios del siglo XX se dedicó al cultivo cerealista, al esparto o la fabricación de cuerda a partir de la fibra de la pita, primando actualmente la actividad ganadera, con una importante cabaña de cabra blanca celtibérica.
Podemos considerar la Finca el Romeral como uno de los mayores santuarios cinematográficos de Almería, con numerosas producciones rodadas en sus parajes, sobre todo westerns.
Su belleza natural y su firme apuesta desde siempre por la sostenibilidad ecológica y el mantenimiento de la cultura tradicional nijareña son atractivo más que suficiente para cualquier aficionado. Por eso, para el grupo Almeriacine siempre ha representado un anhelo especial poder conocerla a fondo.
Cortijo de Genoveses |
El molino harinero del Collado, rehabilitado hace pocos años, preside el vasto panorama. Tanto el molino como el cortijo, arruinado, fueron escenario de 'Una pistola para Ringo' (Duccio Tessari, 1965).
E internándose ya en el camino privado -es necesario permiso- nos encontramos con el cortijo de Genoveses. Hoy deshabitado, alinea por la inclinación del terreno, en una sola planta, vivienda, corral, pajar...representando un ejemplo muy destacado de la arquitectura rural litoral almeriense. No en vano, llamó la atención de Sergio Leone, que situó aquí escenas de 'La muerte tenía un precio' (1965), con los mismísimos Clint Eastwood y Lee Van Cleef en varios momentos de la acción y simulando lugares distintos (la prisión de Álamo Gordo y Aguascalientes). En época mucho más reciente, el mismo cortijo se convertía en la frontera entre Estados Unidos y México en 'Punto de mira' (Karl Francis, 2000)
A medida que avanzamos por el camino bordeado de pitas y enormes pitacos parece que nos vamos aislando y retrocediendo en el tiempo.
Pasamos por el nucleo más reciente, Las Chiqueras, que concentra desde las primeras décadas del siglo XX la mayor parte de la producción agropastoril de la finca (transformación del esparto o de la fibra de pita).
Actualmente, junto a la explotación ganadera, se han dispuesto una dependencia conocida como la Fábrica, apta para eventos y visitas didácticas e incluso un chiringuito que en verano tiene acceso directo desde el camino de la playa de Genoveses. Aquí pudimos localizar algunos momentos de 'Honolulu Baby' (Maurizio Ninetti, 2001)
El núcleo central lo ocupa la vivienda de los dueños, el cortijo El Romeral, una vistosa vivienda de arquitectura burguesa, con evidentes diferencias con el resto de cortijos visitados. El conjunto resulta espectacular, con la vivienda, en ocre amarillo y blanco, rodeada de viviendas de aparceros, cuadras, almacenes, gallineros, palomar, dos enormes eras, un gran aljibe un poco más lejos...
En este punto de la ruta, la historia cinematográfica es más densa y hay que limitarse a enumerar algunos títulos como 'Una pistola para Ringo' (1965), 'Johnny Yuma' (1966), 'Stark, el pistolero' (1968), 'Tepepa' (1969), 'Curro Jiménez' (1977), 'Reina de espadas' (2000) o la reciente 'Snowman's land' (2010)
Algunas escenas rodadas en el cortijo El Romeral |
Camino a Monsu |
El final del camino nos conduce al cortijo de Monsu (nombre original del actual Mónsul), abandonado en una zona más abrupta. Llama la atención la vivienda, en ruinas, que conserva un porche con un arco y una escalera exterior que aparece en unas escenas de 'Cara a cara' (Sergio Sollima, 1967), con dos grandes del western europeo, Gian Maria Volonté y Tomas Milian.
Clint Eastwood, Lee Van Cleef, Gian Maria Volonté, Tomas Milian... |
De vuelta a San José, una nueva cita, cinematográfica y gastronómica, en el hotel restaurante El Sotillo, que también fue destacado escenario en los sesenta de películas emblemáticas del género como 'Por un puñado de dólares' (Sergio Leone, 1964) o 'El día de la ira' (Tonino Valerii, 1967).
Desde Almeriacine queremos reconocer a Oti, a Jaime y a todo el personal del hotel El Sotillo por posibilitar esta visita y por su acogida y atención durante toda la jornada. ¡GRACIAS!
Aclaramos que la finca El Romeral es privada y que esta ruta ha sido posible gracias a una invitación especial de sus propietarios a Almeriacine. El acceso por sus caminos está prohibido.
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